¿Qué?

El Yoga Adaptado es adecuado para cualquier persona que no se sienta cómoda en un estudio de yoga convencional, especialmente para quienes tienen lesiones, limitaciones, discapacidades o personas de la Tercer Edad.

Esta práctica puede beneficiar a cualquiera que quiere conectar con su cuerpo desde el auto cuidado, de una manera suave, sin juicios, de una forma invitacional y respetuosa. 

¿Cómo?

Las clases de Yoga Adaptado suelen impartirse de forma sentada en una silla. Las sesiones suelen durar 60 minutos, incluyendo tiempo para la relajación y la meditación. Los movimientos son  suaves y se centran en encontrar la conexión con el cuerpo y con la respiración, más que en lograr posturas físicas. 

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Puede proporcionar numerosos beneficios para la salud física, mental y emocional:

• Mejora de la fuerza: quizás ayudando a la persona a seguir con sus actividades cotidianas de forma independiente. 

• Mejora de la Flexibilidad.

• Mejora de la Interocepción: la habilidad de conectar con su cuerpo y entender lo que necesita en cada momento para dárselo

• Mejora de la Propiocepción: la habilidad de saber dónde se encuentra su cuerpo en el espacio y coordinar sus movimientos con precisión.

• Reduce el estrés y mejora de la claridad mental: El movimiento consciente y la meditación pueden ayudar a reducir el estrés al traernos al momento presente

¿Para quién?